Quijote

Quijote

viernes, 4 de junio de 2010

Canciones de un camarada errante

I
Una canción es como un pié.
Una canción es como un árbol.
Una canción es una canción por donde se la mire.

Pero una canción es como un símbolo.
Es una destacada nota de una sombra.
Es una destacada astilla de una herida.

Esa no es mi canción.
Esa es otra
Esa no es mi canción

Yo canto con tu voz
O sea con voz ajena
Mi canción está prestada de tu vientre
Mi canción es un regalo de tus ojos
Y vive.

Se mueve del más allá al mas allá
En el horizonte de unas notas desbocadas,
Se mueve sin voz como un preámbulo
O como insidia
Provoca risas, rabia, rencor provoca
Siempre entonado
Como una gotera que no deja de parlotear.

II

Un camarada errante
, es una sinfonía
Es un paso perdido entre escombros
Es la incitación a la armonía
Y el abandono

Son hojas secas en la ciudad
Sin ti
Sin nadie
Y menos que eso.

III

Yo quien soy
Descubro entre la luz los restos de la memoria
Eso me protege.

IV


Y allí te desvaneces.
Eres un lustro de desconsuelo
Un cajón arrinconado
Entre tanta algarabía
Como un oboe y un eco.

V

Es un canto.
Un simple canto.
Una extremidad tosiendo.

Es mi canto.
De cisne degollado.
De naturaleza muerta.

VI

Este caballo muerto
Con fin de nada
Y jinete de nadie
Esta especie de podredumbre
Sin ánimo y sin olor
Como si fuese el mismísimo
Sol con su relumbre y su lava
Como si fuese mi ojo entreabierto.